Sobre al amor a ti mismo

Quiero que llegues a tu propio florecimiento. Si, pareciera egoísmo… pero ¿Es la rosa egoísta cuando florece?, ¿es el sol egoísta cuando brilla? Tu primera y primordial responsabilidad es florecer, hacerte completamente consciente, lucido, alerta, y en esa consciencia serás capaz de ver lo que puedes compartir y cómo puedes solucionar los problemas.
A mi gente les digo: primero sé egoísta, completamente egoísta: florece. Logra el florecimiento y la fragancia y luego espárcelos. Entonces compártelos con esa gente desafortunada que tienen el mismo potencial que tú, pero a quienes la vida no ha dado la oportunidad de ir hacia adentro para saborear su propia divinidad.
Hay algo que sé con seguridad: que cuando hayas florecido, compartirás. No hay forma de evitarlo. Cuando la flor se abre no hay modo para ella de retener su fragancia y mantenerla aprisionada. La fragancia escapa. Se extiende en todas direcciones. Así que primero tienes que estar satisfecho, contento. Primero, sé.
Después, desde tu ser surgirá una fragancia que se extenderá a muchos. Y no será un servicio, será pura alegría de compartir. Y no hay mayor felicidad que la de compartir tu felicidad.


(Tomado del Libro VIDA, AMOR, RISA, de OSHO RAJNEESII. Desde el Surco Editores, 1991, pp. 94, 95, 96)